Llegó la confirmación de un fichaje que estaba acordado hace varios días, Martín Leiva será el pivot titular de Peñarol por sexta temporada consecutiva y con esto las esperanzas de defender la corona están intactas.
Si antes de comenzar con el mercado de pases, a Fernando Rivero le decían “te renovamos cuatro de los cinco titulares”, firmaba con los ojos cerrados y así sucedió. Con la ida ya conocida de Facundo Campazzo, la apuesta era mantener la base del campeón y realizar los retoques necesarios.
Como reemplazar a Campazzo es una tarea imposible, con Nicolás Laprovíttola en Flamengo y ningún regreso rutilante, el puesto de armador estrella en la Liga Nacional está desierto. Hay un grupo de buenos bases, todos en un nivel de paridad (Sahdi, Faggiano, Hopson, Cequeira, Konsztadt, Treise, Lábaque y Cantero entre otros), que no pone a ninguno un escalón o dos arriba del resto.
Las llegadas de dos bases jóvenes y con experiencia, con hambre de gloria y mucho talento son una apuesta muy interesante. Fabián Sahdi, llevó a Quilmes a estar entre los mejores durante toda la fase regular, donde se vistió de héroe en finales cerrados y completó una buena temporada.
Alejandro Konsztadt (1.91) conoce Peñarol y eso no es un dato menor, un jugador que como juvenil vivió el mundo milrayitas (campeón de América 2008) ya tiene una ventaja sobre el resto. Con una temporada tremenda en Obras (revelación 2011-12), campeón de Liga Sudamericana y subcampeón de Liga Nacional, superó algunos inconvenientes físicos en la pasada y hoy se encuentra muy motivado para encarar este desafío.
El caso de Forrest Fisher es para analizar. Un extranjero que llega como goleador en todos los clubes donde participó, si de repente le dicen que va a ser un jugador de rol y a tomar un “tiro cada tanto”, se da media vuelta, arma el bolso y se va. Con este foráneo pasó todo lo contrario.
Aceptó su tarea defensiva (siempre con el mas difícil del rival), cuando tuvo la oportunidad buscó sus lanzamientos (20 puntos ante Regatas en la 2da final) y entendió a la perfección que había que hacer para ganar. Fue campeón en Liga de las Américas, en la Liga de Ecuador y ahora Argentina. Seguramente en esta temporada tendrá mas responsabilidades ofensivas y veremos el mejor Fisher.
Siempre la apuesta de Peñarol es buscar los destacados de la segunda categoría (Safar y Rasio) y en esta temporada se quedó con la “estrella” joven del mercado, Luciano Massarelli. El MVP del TNA y con el ascenso bajo el brazo para Ciclista de Junín, será una variante desde atrás con mucho gol (22 pt), velocidad y revolución en el juego.
El puesto de alero es el mejor cubierto de la Liga, con una de las figuras mas regulares de la temporada como Adrián Boccia (también puede jugar de ayuda base) y el chaqueño Franco Giorgetti, quien con sus 2.04 es pura ilusión para que en este campeonato se destaque y despegue.
Leo Gutiérrez con 10 títulos de LNB, 4 de 4 en finales con Peñarol, convocatoria al Mundial y esa mano intacta, no dan lugar al mas mínimo análisis de lo que significa para el equipo. Mas allá de que pasó una liga en gran nivel, necesita un suplente que de garantías cuando ingrese y Peña encontró uno que conoce el puesto y el rol, como Alejandro Diez.
El olavarriense, pasó sus mejores años de carrera de la 2006/07 hasta el bicampeonato nacional de la 2010/11, siempre en el misma tarea, tan compleja como útil, el suplente del “4″. Tras su experiencia en Boca Juniors (tres temporadas y capitán del equipo), llega con mayor rodaje y con el apoyo del público, a quien “adoptó” como referente de la hinchada (otro punto a favor).
Martín Leiva jugó de sus últimas 6 ligas y ganó 5, siendo titular tanto de Boca en el 2006/07, como en su regreso al país desde 2009 a Peñarol. Eso solo marca que hace tiempo viene dominando la competencia desde su defensa, liderazgo, dominio de tableros, fuerza y actitud, en el puesto de pivot.
El relevo de Leiva, es uno con enorme trayectoria y una experiencia que se notó en los últimos play offs, como Gabriel Fernández, quien se destapó en los momentos mas difíciles de la post temporada con un rendimiento sensacional. Entiende su función en el equipo.
Fernando Rivero puede jugar con muchos quintetos, las variantes abundan y eso es muy bueno, no solo tiene “plan B”, sino “C”, “D” y alguno mas que salga sobre la marcha.
Puede jugar con uno de los bases, Fisher, Boccia, Leo y Leiva o con la doble base, Boccia y los internos. Con Franco Giorgetti en el incial, acompañado con Boccia, Fisher o Massarelli desde el puesto de escolta. Con la variable de Fisher de base, Massarelli, Boccia, Franco y un interno y así podríamos seguir en este juego de opciones que tendrá el Pentacampeón esta temporada.
Peñarol ganó cuatro de las últimas cinco ligas disputadas, es el verdadero monarca de la competencia, en ocho temporadas llegó siempre entre los tres primeros, eso pesa, vale, intimida y se respeta, por eso que este año la apuesta siga manda un mensaje al resto de sus contrincantes.
Los Martines
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